La Oficina de Transformación Digital de la UFV ha desarrollado una serie de píldoras formativas que nos permitirán reducir la curva de aprendizaje, resolver dudas y sacar el máximo partido a esta herramienta y a su integración en CANVAS.  

Una recomendación: antes de preguntarte si se puede hacer con Wooclap, pregúntate si ya lo puedes hacer con CANVAS 😊 

DISEÑA

Si llegas hasta aquí planteándote no cómo, sino para qué y cuándo utilizar alguna de estas herramientas, te damos algunas pistas para que puedas diseñar tus clases.

• Al comienzo de la clase
• Durante la clase
• Después de la clase

AL COMIENZO DE LA CLASE

Las actividades rompehielos tienen la capacidad de animar el ambiente, resolver posibles dudas de los estudiantes y, sobre todo, crear un vínculo que estimule el aprendizaje en grupo. Además, es importante que los estudiantes activen sus conocimientos previos respecto a un tema. Por lo tanto, despierta el interés de tus estudiantes y sitúales en lo que van a aprender, a través, por ejemplo, de las nubes de palabras o lluvia de ideas puedes descubrir las expectativas que tus alumnos tienen respecto a la asignatura o al contenido concreto que vas a exponer. ¿Quieres poner un límite de caracteres o que los alumnos solo puedan enviar una respuesta? Echa un vistazo a ¿Cómo funcionan las nubes de palabras en Wooclap?

Utilizar las actividades que ofrece la herramienta para detectar los conocimientos previos que los alumnos tienen sobre la materia en general o sobre un tema concreto, te permite obtener el punto de partida, planificar tus clases y reorientar, si fuera necesario.

DURANTE LA CLASE

Según el patrón de atención para una clase de 60 minutos definido por Stuart y Rutherford (1978), la atención de un alumno empieza a descender pasados los primeros 15 minutos de clase. Si incluimos actividades participativas en los 35 minutos centrales de la clase, romperemos la inercia de la clase expositiva, ayudaremos a los alumnos a mantener su atención y recuperaremos a los que hemos perdido.

Incorporar preguntas de respuesta múltiple o valor numérico tras la explicación de un concepto concreto permite medir el grado de comprensión y conocer dónde tenemos que profundizar o hacer hincapié.

La posibilidad de plantear preguntas de manera anónima favorece la participación de los alumnos más tímidos, pero también diluye la responsabilidad de contestar. Las dos caras del anonimato, ponlas en la balanza, pregúntate el objetivo que persigues y decide qué te interesa más.

La Universidad Católica de Lovaina lleva colaborando con Wooclap desde 2017. Una colaboración innovadora que comenzó con el objetivo de favorecer las interacciones entre profesores y alumnos a través del smartphone de los estudiantes. Actualmente, la UCL participa activamente en la mejora de la interface de la plataforma. Para Ingrid Bertrand, profesora de letras inglesas en la UCL, “Wooclap permite energizar la clase. Todos los alumnos participan, incluso los más tímidos o los menos seguros. Wooclap ejerce también las habilidades comunicativas de los estudiantes”.

Todas las herramientas analizadas generan información de resultados de manera inmediata, lo que supone un feedback preventivo que permite a los alumnos reflexionar sobre su desempeño, y a los docentes ofrecerles información sobre cómo mejorarlo. Wooclap, por ejemplo, permite enviar un informe personalizado a cada participante, que le permite medir su rendimiento y progreso, ver las preguntas propuestas y comparar sus respuestas con las correctas.

Activar el modo competición que permiten estas herramientas, ofrece un punto lúdico y competitivo. Aprovecha los últimos 10 minutos de clase, donde se produce un ligero repunte de la atención, para generar estas actividades competitivas y crear un ranking de conocimiento por grupos de trabajo. De nuevo, deberás calibrar las ventajas del componente lúdico y motivador de la competición, con el efecto estresor que puede producir en algunos alumnos.

DESPUÉS DE LA CLASE

Tan importante es obtener datos como poder analizarlos después.

Es habitual que los docentes utilicemos varias sesiones para enseñar y reforzar conceptos. Basta con comparar los datos obtenidos en estas sesiones para comprobar si ha mejorado o no la comprensión de estos conceptos.

A medida que avanza el curso, adaptamos nuestra forma de enseñar a la realidad y necesidades de nuestros alumnos. Comparar datos entre sesiones nos permite valorar las distintas estrategias metodológicas que incorporamos en nuestra actividad docente.

Este análisis de datos nos permite tomar decisiones, reconducir las clases o detectar necesidades tanto a nivel grupal como individual.